BASE DE DOCTRINA

Creemos en la obra del Señor Jesús y tenemos como base de fe la Biblia completa. Para darles una idea general de nuestro credo, hemos escogido unos puntos que nos representan bien.

  Misión Cristiana reconoce los puntos de fe que siguen:

1)     La inspiración divina e infalibilidad de las Sagradas Escrituras (la Biblia) como fueron dadas desde su origen, y su suprema autoridad en todos los puntos de fe y de conducta.

2)     La creación es un acto de la voluntad de Dios quien creó al hombre a Su imagen.

3)     La naturaleza pecadora del hombre por causa de la desobediencia de Adán su representante, seguida de la condenación divina.

4)     Jesús es ahora, delante del Padre, el sustituido del pecador, púes ha aceptado morir como sacrificio de propiciación por el pecado del mundo.

5)     La acción del Espíritu Santo quien advierte, en varios momentos, y de diferentes maneras, al pecador de su estado de perdición natural y le invita al arrepentimiento y a la fe en la muerte de Jesús como única obra suficiente para la salvación de aquél que confía en ella.

6)     La resurrección de Jesucristo como victoria sobre la muerte, último enemigo, y a la ascensión del Hijo de Dios a la diestra del Padre, de donde intercede para los creyentes.

7)     La morada del Espíritu Santo en el creyente.

8)     La necesidad del bautismo del Espíritu Santo para el revestimiento sobrenatural del creyente.

9)     La acción del Espíritu Santo, en todos los aspectos bíblicos con los diferentes frutos y dones espirituales.

10)   La necesidad de los ministerios en la Iglesia para el perfeccionamiento y la edificación del Cuerpo de Cristo.

11)   El bautismo del creyente, como fue practicado en la Iglesia primitiva.

12)   La Cena del Señor, conmemoración de la muerte de Jesús y anuncio de Su regreso próximo.

13)   La espera del regreso personal de nuestro Salvador, Jesucristo.

14)   La existencia de un lugar de sufrimiento para los que, cuando mueran, son sin Cristo; o de un lugar de serenidad para los que han recibido a Jesús, de donde la necesidad de recibir a Cristo y de anunciarlo a las naciones.